Consideremos que un relé es similar a una llave que controla el paso del agua a través de una tubería. En principio, la llave puede estar abierta o cerrada, lo que implica que el agua fluya o no.
En el caso de los relevadores, estos permiten el paso de la corriente eléctrica (flujo de los electrones) cuando sus contactos están cerrados, y lo interrumpen al abrirlos. Es por esto que también se consideran como interruptores eléctricos.
Para entender cómo funciona un relevador, debemos conocer sus partes principales:
1.Bobina: es un hilo de material conductor de la electricidad, generalmente cobre, que se encuentra enrollado en un núcleo de hierro. Cuando se conecta a una fuente de alimentación, la bobina “se convierte” en un electroimán. Eso significa que es capaz de atraer piezas de metal.
2.Armadura: es una pieza móvil hecha de metal que es atraída hacia la bobina cuando se comporta como imán.
El propósito de la armadura es empujar a los contactos para cambiar su posición.
3.Contactos: son placas hechas de un material conductor de la electricidad que cambian de posición debido a la armadura. Los contactos se encargan de la conexión y desconexión de un circuito eléctrico.
En futuras entradas veremos por qué se utilizan los relevadores en todo tipo de aplicaciones. Desde industriales, hasta residenciales.
Te invito a ver la siguiente mini-cápsula sobre relevadores que tenemos preparadas para ti en YouTube.